El sábado día 24 nos dirigimos
hacia el pueblo de Paradas para realizar una visita diferente.
Esta vez íbamos
a conocer una casa que había sido realizada al modo del estilo árabe por su
propietario. El interior se había inspirado en la Alhambra, y después de pasar
un hall con algunos objetos del estilo, entramos al comedor, muy decorado con
yeserías en las paredes y techo de tracería, hermosos jarrones y decoración al
uso, después pasamos a un jardín donde había dos fuentes, una de pila de mármol
y otra de surtidores, y a continuación lo más espectacular, una precios piscina,
y además podía ser cubierta mediante una gran pieza de madera.
Sorprendente la casa y el trabajo de toda una
vida de un hombre enamorado del arte árabe.
Nos dio tiempo a pasear por
Paradas, un pueblo limpio y ordenado, donde la gente estaba deseando hablar con
nosotros. Conservaba las casas típicas de dos plantas con grandes ventanales
con rejas que bajaban hasta el suelo. Dulces y chacinas son especialidades
afamadas de este lugar.
A mediodía nos desplazamos al
Arahal para comer y conocer el pueblo. Hermosas sus iglesias, casas barrocas,
la Plaza Mayor y el Ayuntamiento de grandes ventanales de medio punto.
Regresamos a Sevilla contentos de haber conocido estos dos bonitos pueblos.
